Los presidentes solo pueden ejercer dos mandatos, según la Constitución indonesia.Mientras el mundo sigue lidiando con las secuelas de la pandemia de COVID-19, con el estrés añadido por la guerra en Ucrania y la consiguiente escasez de bienes, algunos políticos han pedido al presidente indonesio Joko Widodo (Jokowi) que prolongue su mandato presidencial más allá de los dos mandatos legales o posponga las elecciones de 2024. En medio de los crecientes rumores, el propio Jokowi fue filmado ordenando a sus asistentes que abandonaran la idea:
«Que nadie aborde más el tema de la prórroga [del mandato] ni el retraso [de las elecciones]. No más».
Emitió la orden durante una reunión del gabinete presidencial el martes 5 de abril, cuando ordenó a sus asistentes que se preocuparan de la creciente tasa de inflación de la nación en vez de suscitar controversia en torno a las elecciones de 2024.
No descartó la idea por completo, señaló que planea cumplir con la Constitución indonesia. Sin embargo, los partidarios de la idea sugieren que su mandato podría prolongarse legalmente mediante una enmienda constitucional o un retraso electoral.
Según la Constitución actual, los presidentes en Indonesia pueden ejercer un máximo de dos mandatos de cinco años. Jokowi se está acercando al final de su segundo mandato y, por ahora, no podría presentarse a un tercero.
Sin embargo, la idea ha cobrado fuerza en las últimas semanas después de que varios funcionarios de alto nivel, como el influyente ministro Luhut Pandjaitan, apoyaran la idea, lo que provocó un amplio debate y controversia en la nación.
Durante una entrevista, Luhut afirmó que los datos de las redes sociales indicaban que la mayoría de los indonesios apoyaban a la prórroga del mandato de Jokowi: «Mi opinión personal es que será mejor. Si (el presidente) consigue una prórroga… solo una vez».
Sin embargo, una encuesta del Saiful Mujani Research and Consulting (SMRC) muestra que más del 70 % de los indonesios rechazan el plan de prórroga.
También los portavoces de los medios han criticado la idea. El 7 de marzo, Endy Bayuni, redactor jefe de The Jakarta Post, escribió un artículo de opinión en el que criticaba la sugerencia de que Jokowi prolongara su mandato, la calificó de «subversiva» y de «receta segura para acabar con la democracia».
El presidente debe desmentir las informaciones de los medios que circulan de que la iniciativa de lanzar el discurso de retrasar las elecciones partió de su oficina. Resulta chocante escuchar que una idea que claramente socava los procesos políticos democráticos provenga de quienes ocupan los más altos cargos de la nación. […] Están traicionando la Constitución, que confía en los partidos políticos para apoyar la democracia y no para subvertirla.
Sus partidarios afirman que la prórroga es necesaria ya que simplificaría la recuperación económica de Indonesia tras la fuerte caída por la pandemia de COVID-19, y permitiría al presidente poner en práctica su agenda, incluido su proyecto de reubicación de la capital por el valor de 35 000 millones de dólares.
A lo largo de su carrera, Jokowi ha sido conocido por su fuerte política económica. Esperaba utilizar su mandato para impulsar el desarrollo económico de la nación, y establecer a Indonesia como una nación de altos ingresos. Sin embargo, en los últimos dos años, Indonesia ha tenido que hacer frente a una creciente inflación y a una recesión por la pandemia de COVID-19, lo que le ha hecho descender de «país de renta media-alta» a «país de renta media-baja», según las clasificaciones del Banco Mundial. Así que no es de extrañar que algunos partidarios de Jokowi quieran darle más tiempo para llevar a cabo sus reformas previstas.
Además, informes recientes indican que Jokowi es muy popular en el archipiélago, con un índice de aprobación superior al 70 %, según informa Kompas, una de las principales publicaciones en línea de Indonesia.
A pesar de su popularidad, algunos se preocupan por lo que el debate sobre las condiciones podría significar para la cuarta democracia del mundo.