La expansión del pmi de china en octubre apunta al impacto de las ayudas fiscales

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La actividad manufacturera de China se expandió por primera vez en seis meses y los servicios repuntaron en octubre, lo que indica que las recientes medidas de estímulo de Pekín están ayudando a la maltrecha economía a enderezar el rumbo. El índice de gestores de compras (PMI) de la Oficina Nacional de Estadísticas subió el jueves hasta 50,1 desde 49,8 en septiembre, justo por encima de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción y superando la previsión mediana de 49,9 según un sondeo de Reuters. Otra señal alentadora es que el PMI no manufacturero, que incluye la construcción y los servicios, subió a 50,2 este mes, tras caer a 50,0 en septiembre. Los dirigentes económicos confían en que los recientes estímulos anunciados a finales de septiembre impulsen el crecimiento económico hacia el objetivo del 5% fijado para este año y reactiven el crédito y la inversión, mientras la fuerte caída del mercado inmobiliario y la frágil confianza de los consumidores siguen disuadiendo a los inversores.

«Se trata, sobre todo, de un indicio de los primeros efectos del mayor apoyo fiscal, propiciado especialmente por la aceleración de la emisión de deuda pública», dijo Xu Tianchen, economista jefe de Economist Intelligence Unit. «En agosto-septiembre se registró un volumen récord de este tipo de emisiones, lo que se tradujo en gasto fiscal».

El estado de ánimo del sector manufacturero lleva meses deprimido por la caída de los precios de producción y la disminución de los pedidos, con la industria aquejada de la misma falta de confianza que ha frenado a los inversores y a los consumidores nacionales.

Signos de recuperación sin embargo, los primeros indicios apuntan a que pekín ha dado un paso más en su política de estímulos para apuntalar la segunda economía mundial y a que la confianza está aumentando lentamente. china está considerando aprobar la próxima semana la emisión de más de 10 billones de yuanes (1,40 billones de dólares) en deuda adicional en los próximos años, informó reuters el martes, que se utilizaría principalmente para ayudar a los gobiernos locales a hacer frente a los riesgos de la deuda fuera de los balances.

El desempleo juvenil disminuyó en septiembre, lo que sugiere que medidas como los subsidios al empleo destinados a animar a las empresas a absorber a millones de recién licenciados están surtiendo efecto. Mientras tanto, las ventas al por menor y las ventas de producción de las fábricas batieron las previsiones el mes pasado, lo que sugiere que la demanda está empezando a remontar. «El 50,1 es la menor expansión posible del PMI, pero aun así supera las expectativas de contracción continuada y es una señal positiva de que el pequeño repunte de la producción industrial que vimos en septiembre debería continuar», dijo Lynn Song, economista jefe para la región de Gran China de ING. «En el futuro, tendremos que ver si el despliegue de estímulos puede conducir a una recuperación de la demanda interna para compensar una demanda externa potencialmente más débil», añadió Song. Las exportaciones de China, la única área que ha destacado en positivo, registraron un bache el mes pasado y la economía creció al ritmo más lento desde principios de 2023 en el tercer trimestre. Economistas chinos ya han señalado con anterioridad que las encuestas basadas en la confianza suelen presentar un panorama más sombrío que los indicadores de datos concretos. En la encuesta, uno de cada tres encuestados pronosticó que la actividad de las fábricas volvería a entrar en expansión este mes.

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