En un comunicado, las autoridades informaron que se echarán a andar fábricas que no están produciendo energía debido a la tensión financiera o por los altos precios internacionales del carbón.
India se enfrenta a su peor crisis energética en más de seis años, y los funcionarios se han esforzado por organizar el suministro para las plantas de energía cuyos inventarios se encuentran en mínimos de más de nueve años.
De acuerdo con la fuente, más del 43 por ciento de las industrias alimentadas con carbón importado, que tienen una capacidad total de 17,6 gigavatios y representan el 8,6 por ciento de la capacidad total de energía de carbón de la India, están actualmente inactivas.
Las autoridades también decidieron invocar una cláusula de emergencia en la ley de electricidad del país para permitir que las plantas funcionen.
Funcionarios del Ministerio de Energía trabajarán con los involucrados en la reestructuración de la deuda de las factorías inactivas bajo estrés financiero para que funcionen.
Igualmente, un comité del gobierno facilitará la transferencia de los mayores costos de generación a los clientes, indica la orden gubernamental.