Este artículo ha sido escrito por Anne Vandenabeele, economista de Capital Group
No cabe duda de que el contexto demográfico de Japón en los últimos diez años ha sido complicado. Sin embargo, las cosas podrían estar cambiando, ya que la inflación que se ha registrado tras la pandemia ha obligado a las compañías japonesas a actuar.
En un país en el que los aumentos salariales no son habituales, casi el 30% de las principales compañías japonesas han anunciado incrementos este año. Por ejemplo, Nintendo y Hitachi han anunciado aumentos salariales del 10% y casi el 4% respectivamente. Fast Retailing ha acordado un incremento salarial de hasta el 40%.
Los fuertes aumentos salariales afectarán a los beneficios de las compañías, pero los márgenes de beneficios se sitúan en los niveles más altos de las últimas décadas, así que muchas compañías japonesas pueden permitirse repartir las ganancias.
Las autoridades y los sindicatos del país están de acuerdo con esta idea. Han estado insistiendo en incrementos salariales generalizados de en torno al 3,8% este año, más o menos en consonancia con la inflación subyacente, que ha registrado el nivel más alto de los últimos 41 años (fuente: Oficina de Estadísticas de Japón).
En opinión nuestra opinión, la disposición de las compañías a aumentar los salarios está correlacionada con sus expectativas de crecimiento de la demanda en los próximos tres años. «Esta tendencia podría favorecer al consumo en el futuro.
La presente información se proporciona únicamente a efectos informativos y no constituye una oferta, ni una solicitud para formular una oferta, ni una recomendación de compra o venta de los valores o instrumentos mencionados en el presente documento. Las cifras hasta 2021 reflejan los datos disponibles más recientes a 31 mayo 2023. El crecimiento salarial medio refleja precios constantes a la paridad del poder adquisitivo (PPA) del dólar estadounidense de 2021, indexado a 100 en 2000. La PPA es una medida del precio de bienes específicos en distintos países y se utiliza para comparar el poder adquisitivo absoluto de las divisas de los países. Fuente: Capital Group, Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE