La primera ministra de Tailandia, Paetongtarn Shinawatra, ha pedido perdón por la muerte en octubre de 2004 de 78 manifestantes que fueron obligados a amontonarse unos encima de otros en camiones del Ejército tailandés en el marco de las protestas que estallaron a raíz de la detención de seis musulmanes en la ciudad de Tak Bai, en la provincia sureña de Narathiwat.
«Me entristece profundamente lo que ocurrió y me disculpo en nombre del Gobierno. Haremos todo lo posible para garantizar que este tipo de incidentes no vuelvan a ocurrir», ha subrayado en el marco del aniversario de la tragedia, según ha recogido ‘The Nation’.
Los abogados que representan a las víctimas y sus familiares presentaron el pasado mes de abril cargos penales contra nueve exfuncionarios que estuvieron a cargo de la violenta represión contra los manifestantes. El plazo de prescripción del caso expira este viernes, por lo que ya no se podrán iniciar nuevas acciones legales.
Asimismo, en septiembre de 2024 otras ocho personas fueron acusadas por la masacre, ocurrida bajo el mandato del padre de la actual primer ministra, Thaksin Shinawatra, quien, si bien pidió perdón, no asumió responsabilidades por lo ocurrido.
Más de mil personas se concentraron en 2004 en una comisaría de Tak Bai para exigir la liberación de los seis detenidos. Al menos siete personas murieron por disparos de la Policía, mientras que miles permanecieron bajo custodia sin atención médica.