El IPC de mayo sube un +3,5% anual en Japón, en línea con lo esperado y desde +3,6% anterior, si bien, el dato Subyacente (sin alimentos frescos y energía) aumenta hasta +3,3% anual, una décima por encima de lo esperado y tres décimas por encima del anterior.
Opinión del equipo de análisis: La evolución de la tasa subyacente pone de manifiesto que se sigue produciendo un traslado de ciertas presiones inflacionistas, en un entorno de elevada incertidumbre sobre el desenlace de la guerra arancelaria y el reciente incremento de la volatilidad en el precio del petróleo tras el inicio del conflicto entre Israel e Irán. Nuestras expectativas apuntan a que el Banco de Japón continuará con su política de subida gradual de tipos.