A principios de esta semana, el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, viajó a Tailandia para conocer de primera mano la labor que se está haciendo gracias a los nuevos proyectos de desarrollo del fútbol. Con la construcción del nuevo centro de futsal y gestión de partidos, la Federación Tailandesa de Fútbol (FAT) no solo desea impulsar a la selección nacional de futsal, sino también la calidad de los entrenadores y los árbitros.
El programa de becas de la FIFA para entrenadoras (Programa de formación) es fundamental para ello. Gracias a él, la FAT ha puesto en marcha una iniciativa para que aumente el número de entrenadoras tailandesas, uno de los objetivos principales del Programa de Desarrollo del Fútbol Femenino de la FIFA. Con estas becas, numerosas candidatas recibieron apoyo económico de la FIFA para cubrir los gastos de la formación como entrenadoras.
«En nombre del Departamento de Fútbol Femenino de la Federación Tailandesa de Fútbol, quisiera agradecer a la FIFA su apoyo inquebrantable y la oportunidad que nos ha dado de formar parte del Programa de Desarrollo del Fútbol Femenino de la FIFA, que incluye iniciativas como las Becas de formación para entrenadoras —declaró Rumpha Varaveerakul, directora del Departamento de Fútbol Femenino de la FAT—. Gracias por brindar a nuestras técnicas la oportunidad de avanzar en su carrera. Creo que contar con entrenadoras competentes, que se han formado adecuadamente, beneficiará a nuestras jugadoras. Será decisivo para que mejoren nuestras selecciones y ligas».
Varaveerakul se refiere a los éxitos ya logrados gracias a los constantes esfuerzos del país por fomentar el fútbol femenino: En 2015, la selección femenina se clasificó para la Copa Mundial por primera vez en la historia de Tailandia. El mes próximo las Changsuk lucharán en Nueva Zelanda por obtener una de las últimas tres plazas del torneo que se celebrará en Australia y Nueva Zelanda en 2023. Si logran clasificarse, será su tercera participación consecutiva en la competición.
Además, Tailandia trabaja codo a codo con la División de Fútbol Femenino de la FIFA para obtener licencias de clubes a nivel nacional para la liga femenina. Gracias a la mejora de la profesionalización del fútbol femenino, dentro y fuera del terreno de juego, se está llegando a otro nivel. Velar por la formación de entrenadores, dentro de este proceso, es fundamental.
«La Federación Tailandesa de Fútbol ofrece becas de los niveles G a A, así como un curso para guardametas C, con la intención de formar a entrenadoras tailandesas y de mejorar la liga femenina. Con el apoyo de la FIFA, hemos puesto en marcha los programas femeninos de niveles B y A —explica Carles Romagosa, director de desarrollo técnico de la FAT—.
Gracias a la FIFA, mejoramos la formación de entrenadoras y personal administrativo para que sigan creciendo el fútbol base, el femenino, el juvenil y el sénior, así como las ligas. Hasta ahora, estas entrenadoras han demostrado que tienen muchas competencias en formación de entrenadoras, selecciones y detección del talento. Nuestro principal objetivo es transmitir la filosofía de la federación a estas entrenadoras y fomentar el talento, para poder ofrecer en el futuro mejores programas de desarrollo del fútbol femenino».
Gracias a la iniciativa de la FAT de ofrecer un curso específico para mujeres, el pasado mes de noviembre 18 entrenadoras obtuvieron el diploma de nivel B de la AFC. Este mes, otras técnicas empezarán la formación, para sacarse el título A.
«Estoy muy contenta de poder participar en este curso patrocinado por la FIFA para obtener el diploma A de la AFC. Aplicaré todo lo que aprenda en este curso, tanto en el aspecto técnico como en el práctico, así como mis habilidades, a la selección tailandesa, para ir mejorando nuestro rendimiento —explica Junpen Seesruam, que participó con Tailandia en la Copa Mundial Femenina Canadá 2015™ y ahora es segunda entrenadora nacional—. Estoy agradecida a la FIFA, por el apoyo, y a los directores del curso, por sus consejos».