El Ministerio de Industria de Tailandia está estudiando la posibilidad de modificar la legislación que regula las fábricas de fuegos artificiales tras la explosión mortal de una instalación en Suphan Buri.
Según el Secretario Permanente de Industria, Nattapol Rangsitpol, la iniciativa responde a una orden del Viceprimer Ministro Somsak Thepsutin, cuyo objetivo es mejorar la gestión de las pequeñas fábricas que puedan suponer un riesgo para las comunidades cercanas.
Nattapol explicó que se está creando un nuevo comité para reevaluar la Ley de Fábricas de 1992 junto con las directrices de seguridad y medio ambiente. El Departamento de Obras Industriales (DIW) ha recibido instrucciones para adaptar la legislación, centrándose en los pequeños fabricantes de fuegos artificiales, incluidas las instalaciones que funcionan con maquinaria de menos de 50 caballos de potencia o que emplean a menos de 50 trabajadores.
Se está creando un nuevo comité para reevaluar la Ley de Fábricas de 1992 junto con las directrices de seguridad y medio ambiente
La medida representa una estrategia más amplia de la administración central para prevenir accidentes que puedan afectar a los trabajadores, los residentes locales y el medio ambiente. En época de sequía, la DIW emite avisos a los sectores manufactureros de alto riesgo, aconsejándoles métodos de prevención de incendios. Esto incluye la publicación de un manual de seguridad que abarca las inspecciones, el mantenimiento y las actualizaciones de los equipos eléctricos y la maquinaria.
El ministro de Industria, Pimphattra Wichaikul, subrayó también en una reunión reciente la importancia de realizar inspecciones anuales en las fábricas, sobre todo en las que almacenan sustancias peligrosas.