AMLO obsequia desdén a Japón

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En México no ha iniciado el sexenio 2024-2030, pero ya existen señales de política exterior de que iniciará mal.

El presidente López Obrador heredará a su sucesora una deuda con Japón: ha decidido que México no participe en la Expo Mundial Osaka 2025.

Las exposiciones mundiales o universales son equivalentes a los Mundiales de futbol, pero en el ámbito social. Osaka 2025 tendrá como tema central: “Diseñando la sociedad del futuro para nuestras vidas”.

Ya son casi cinco años en los que el presidente López Obrador ha hablado muy poco sobre el futuro de México.

El arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, creador del estadio Azteca, diseñó el pabellón de México en la Exposición Universal de Sevilla en 1992. En la isla de la Cartuja se asentó la magnífica obra del arquitecto mexicano.

Recuerdo haber disfrutado la visita con plena satisfacción de que México había realizado un magnífico esfuerzo internacional.

¿Por qué AMLO no quiere que México participe en Osaka?

El presupuesto que destinaron los gobiernos de Miguel de la Madrid y el de Carlos Salinas de Gortari fue de 53 millones de dólares (Wikipedia). Para la Expo Osaka 2025, el gobierno de AMLO no quiere destinar 40 millones de dólares. Muchas empresas privadas podrían coparticipar, pero para el presidente mexicano, lo más importante ahora es canalizar todos los recursos necesarios para asegurar la victoria de Claudia Sheinbaum.

La embajadora mexicana en Japón Melba Pría es una gran maratonista, pero ha encajado más de una astilla diplomática. Miembro del tándem Ebrard, Melba ha tenido serias diferencias con funcionarios de la Secretaría de Economía, particularmente a través de acciones injerencistas en tareas que por ley corresponden a Economía.

Tal parece que esa fue la constante durante la gestión de Ebrard: evitar que Tatiana Clouthier pudiera alcanzar objetivos no optativos impuestos por la Secretaría de Economía. Lo vimos con el Acuerdo Global con la Unión Europea: el entonces secretario rechazó la propuesta de los europeos de fragmentar el acuerdo para ganar velocidad.

Orgullosa por una política mexicana exterior feminista (inexistente), la embajadora Melba Pría ha acudido a reuniones con empresarios japoneses para hablar sobre la equidad de género.

La embajadora Pría ha condicionado la presencia de funcionarios de Economía a reuniones con empresarios japoneses sólo en los minutos cuando se aborden temas comerciales.

La decisión de no participar en la Expo Osaka 2025 arrastra a la embajadora Melva Pría.

La deuda diplomática de AMLO con Japón será enorme; lo mejor para Pría será el próximo maratón.

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