Malasia, un país asiático que está inmerso en un profundo proceso de transformación económica y social, sabe lo importante que pueden ser para su aposentamiento futuro el incentivar sus capacidades militares. Los presupuestos generales de Malasia para 2025 incluyen así importantes partidas tanto para el Ministerio de Defensa como para el del Interior, buscando fortalecer la seguridad nacional y mejorar las capacidades militares.
En esa asignación presupuestaria, le corresponde al Ministerio de Defensa un total de 21.130 millones de ringgits malayos, unos 4.440 millones de euros. La cifra supone un aumento del 7,08% respecto a la de 2024. Del total, está previsto que una cuarta parte se destinen a las partidas de mantenimiento, reparaciones y adquisición de activos militares para las diferentes ramas de sus Fuerzas Armadas.
Con esa inversión se tiene como objetivo seguir con el proceso de reemplazar determinados equipos obsoletos, mejorar las capacidades de otros incrementando su vida útil y mejorar la preparación general del país para asumir aquellos desafíos de la defensa que se concreten en un futuro más o menos cercano.
El Ministerio del Interior recibirá 19.500 millones de ringgit, casi 4.100 millones de euros, cifra que crece poco más del 2% frente a la precedente. Esos recursos adicionales estarían destinados a mejorar la seguridad interna y las capacidades que permiten aplicar diversas leyes.
Se apuesta como principales medidas el mejorar la seguridad fronteriza con nuevas lanchas patrulleras, obtener buques con capacidades multipropósito y dar un impulso a los puestos de seguridad en la zona este de Malasia; complementariamente se asignan 462 millones de euros más a la Policía Real malaya que también se aplica en obtener mejores garantías en el proceso que busca los mejores niveles de Seguridad del país.
Son inversiones económicas claves dentro del compromiso del gobierno de Malasia en modernizar sus fuerzas de Defensa y en el fortalecimiento de las operaciones, tanto internas como externas, de Seguridad.