El P-8A de la RAAF operará desde la Base Aérea de Kadena en Japón, realizando vigilancia aérea para monitorear y detectar transferencias ilegales de mercancías de barco a barco en la región.
El comandante del escuadrón nº 11, Adam Saber, ha dicho 1ue el escuadrón ya tiene experiencia en operaciones en la región, ya que ha contribuido a la operación Argos en varias ocasiones desde su inicio, y añade después, «La versatilidad del avión P-8A, su interoperabilidad con los países asociados y su excepcional fiabilidad lo hacen idóneo para la operación Argos.»
Las sanciones limitan las importaciones norcoreanas de petróleo refinado y crudo y sus exportaciones de carbón, todas ellas facilitadas por dichas transferencias.
Pero los medios de las Fuerzas de Defensa Australianas (ADF) no sólo se limitan al P-8A, sino que además desde el año 2018, se realizan misiones de vigilancia con buques de la Marina Real Australiana y otros aviones de apoyo.
Con este nuevo despliegue. la RAAF ha puesto en esta misión 14 veces al P-8A y 12 veces a buques de la Royal Australian Navy.
El Jefe de Operaciones Conjuntas, el Vicealmirante Justin Jones, ha declarado, «Seguiremos operando donde sea necesario para hacer cumplir estas sanciones, de conformidad con el derecho internacional, junto con los países asociados»
No sólo Australia realiza estas misiones, sino que otros países como Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Nueva Zelanda, el Reino de los Países Bajos, la República de Corea, el Reino Unido y los Estados Unidos, llevan a cabo operaciones en apoyo de las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.