La primera ministra de Tailandia, Paetongtarn Shinawatra, comenzará este miércoles una visita oficial a China para reafirmar las relaciones diplomáticas que cumplen 50 años y con asuntos en agenda como la continuidad del turismo chino y la cooperación para hacer frente a los centros de estafas en línea en el Sudeste Asiático.
Por invitación del primer ministro de China, Li Qiang, la dirigente tailandesa hará su primera visita a Pekín desde que asumió el cargo en agosto de 2024, con el propósito de abordar temas como la seguridad, después de que varios ciudadanos chinos fueran víctimas de estafa en las últimas semanas, atraídos por falsas ofertas de trabajo en Bangkok.
Aunque la nota oficial de la Cancillería tailandesa dice que el objetivo del viaje es conmemorar el medio siglo de bilateralismo -que incluirá una reunión el jueves con el presidente Xi Jinping-, la propia Shinawatra explicó que el turismo y los centros de estafas que operan en zonas fronterizas con Myanmar y Camboya serán temas centrales en su agenda.
La política de 38 años, que estará en China hasta el sábado, «reafirmará su compromiso político de promover los objetivos compartidos de promover la seguridad y el bienestar, al tiempo que se profundiza el entendimiento y la cooperación entre los dos pueblos», dice el escrito.
La mandataria tiene previsto reunirse con ejecutivos de empresas tailandesas y chinas «para fortalecer el comercio» bilateral, que alcanzó en 2023 los 126.300 millones de dólares estadounidenses, lo que consolidó a Pekín como el mayor socio de Bangkok, como ha sido desde 2012, según datos de la Asociación de Estados del Sudeste Asiático (ASEAN).
Entre los asuntos programados destacan la construcción del primer tren de alta velocidad entre Tailandia y China, a través de Laos, y avanzar en negociaciones relacionadas con vehículos eléctricos, un tema en el que Pekín lleva la batuta mundial.
A mediados de enero, para asegurar la continuidad del turismo, Shinawatra reafirmó a los ciudadanos chinos -que conforman el grupo que más visita a Tailandia cada año- que su nación sigue siendo un destino seguro, al que acudieron más de 35 millones de visitantes extranjeros en 2024.
Incluso el Gobierno difundió un vídeo en el que la funcionaria habla en mandarín en un intento por disuadir las preocupaciones surgidas luego de que dos actores chinos que fueron engañados con falsas ofertas de trabajo en Tailandia y trasladados a la frontera birmana, donde proliferan centros de esclavitud moderna, y posteriormente rescatados por las autoridades.
El país del Sudeste Asiático espera recibir este año 40 millones de extranjeros, para mantener el turismo entre sus mayores fuentes de ingresos, por lo que ha reiterado su lucha contra los centros de estafa controlados por bandas criminales que obligan a personas que fueron captadas bajo engaño a conseguir nuevas víctimas.
Las autoridades de China y Tailandia han ventilado varios acercamientos que buscan fortalecer la lucha conjunta contra este flagelo, si bien reconocen que se trata de un primer paso en un camino de largo aliento, sin estimaciones de tiempo por ahora.
El viernes, Shinawatra participará en la ceremonia de apertura de los novenos Juegos Asiáticos de Invierno de 2025, en Harbin.
(c) Agencia EFE