Indonesia: Prabowo amenaza con confinar a funcionarios corruptos en una isla

El presidente de Indonesia, Prabowo, dijo ayer que quiere detener a los condenados por corrupción en una penitenciaría especial en una isla remota, reiterando la postura de línea dura de su administración contra funcionarios y otras figuras de alto perfil que cometen este tipo de delitos. Durante una visita al Ministerio de Educación Primaria y Secundaria en Yakarta, Prabowo criticó a los funcionarios corruptos por privar a los ciudadanos de recursos destinados al bienestar público. “Los sacaremos de nuestra tierra. Si es necesario, asignaré un presupuesto especial para construir una prisión en una zona remota de donde no puedan escapar. «Encontraremos una isla para que cada fugitivo tenga que enfrentarse a los tiburones», afirmó Prabowo, según el periódico Jakarta Globe. Prabowo luego destacó el impacto negativo de la corrupción en la comunidad, argumentando que los responsables de los delitos de corrupción se encuentran entre los mayores obstáculos para los esfuerzos de desarrollo de Indonesia.

Los maestros, los médicos, los trabajadores de la salud y los agricultores se encuentran entre quienes más sufren las consecuencias de la mala gestión de los fondos públicos por parte de funcionarios corruptos, dijo el presidente. “Estamos decididos a hacer todo lo posible, con todos los recursos a nuestra disposición, para crear un gobierno limpio, libre de corrupción. “Con nuestros vastos recursos y riqueza, si es posible, reduciremos el desperdicio y la corrupción”, afirmó Prabowo. Los funcionarios corruptos, añadió el presidente, “deben entender que estoy dispuesto a morir por esta nación y este país. “No tengo miedo de ninguna mafia”.

Esta no es la primera vez que Prabowo arremete públicamente contra la corrupción en las instituciones. En diciembre pasado, instó a los jueces a adoptar una línea más dura contra los condenados por corrupción, afirmando que quienes causan pérdidas de cientos de billones de rupias al estado merecen décadas de cárcel. Indonesia ha sido escenario de varios casos de corrupción de alto perfil: el año pasado, el destacado empresario Harvey Moeis fue sentenciado a 6 ​​años de prisión y multado con 13 millones de dólares por su participación en un fraude masivo en la minería de estaño. El mes pasado, varios ejecutivos de subsidiarias de la empresa estatal de petróleo y gas Pertamina fueron arrestados por su participación en un escándalo de corrupción de petróleo crudo valuado en 12 mil millones de dólares. También están en curso investigaciones sobre asignaciones irregulares de subvenciones que involucran a funcionarios del banco central y miembros del parlamento.