Entre las nuevas medidas se encuentra la prohibición de importar metales preciosos, como el oro, así como la congelación de los activos de 57 personas vinculadas al régimen ruso, informó el Ministerio de Exteriores en un comunicado, una decisión en línea con los compromisos suscritos en la cumbre más reciente del G7, del que Japón forma parte.
Además, el Ejecutivo nipón prohibió las exportaciones a 65 empresas rusas y 25
bielorrusas, y que se presten servicios de contabilidad, consultoría o auditoría a la Federación, entre otros.
Entre las personas sancionadas se encuentran el viceprimer ministro y jefe de Gabinete del Ejecutivo ruso, Dmitri Grigorenko; el oligarca Sergéi Roldugin, supuesto custodio de la riqueza del presidente ruso, Vladimir Putin, en el extranjero; y su esposa, Elena Mirtova, entre numerosos altos cargos del ejército del país.
El aumento de las sanciones de hoy se produce dos meses después de que el Gobierno japonés anunciara otra ronda de sanciones contra Rusia, que incluían la congelación de activos de 141 personas, entre ellas el primer ministro del país, Mikhail Mishustin, y la prohibición de las exportaciones a 71 empresas rusas.
Semiconductores
Son ya más de 560 personas y más de 40 empresas y entidades las cubiertas por sanciones del país asiático.
En sus tandas previas de sanciones, Japón decidió dejar de exportar semiconductores y componentes para microchips que pudieran ser empleados por la industria militar rusa y, entre otras categorías de productos, paralizó también las ventas de automóviles de lujo a Rusia, entre otras medidas punitivas adoptadas a raíz de la invasión rusa de Ucrania