Los líderes del G7 lanzaron este domingo un gran plan de infraestructuras, impulsado por Estados Unidos, para contrarrestar el avance de China.
Según la Casa Blanca, la iniciativa, bautizada como «Colaboración por la Infraestructura Global y la Inversión», pretende impulsar el desarrollo de países de ingresos bajos y medios, fortalecer la economía global y la cadena de suministros.