El déficit fiscal de Corea del Sur ha aumentado 21 billones de wones (16.800 millones de dólares) durante los 11 primeros meses de 2022, en comparación con el mismo período del año pasado, debido al incremento del gasto ante la pandemia.
Según el informe de Finanzas Públicas Mensuales, publicado, este jueves, por el Ministerio de Economía y Finanzas, el balance fiscal administrado, un indicador principal de salud fiscal calculado en un término más estricto, registró un déficit de 98 billones de wones (78.712 millones de dólares) durante el período enero-noviembre, lo que supone un aumento frente al déficit de 77 billones de wones (61.845 millones de dólares) de un año antes.
El ingreso fiscal de Corea del Sur llegó a 373,6 billones de wones (300.172 millones de dólares) durante el período mencionado, lo que representa un incremento de 50,2 billones de wones (40.334 millones de dólares) en comparación interanual, gracias al aumento de los impuestos de sociedades y sobre la renta.
Esto hizo que el ingreso total para los 11 primeros meses de 2022 llegase a 571,6 billones de wones (459.194 millones de dólares), lo que constituye una subida interanual de 47,7 billones de wones (38.320 millones de dólares).
Mientras tanto, el total de gastos, durante los 11 meses, se situó en 622,5 billones de wones (500.060 millones de dólares), en comparación con los 546,3 billones de wones (438.848 millones de dólares) registrados en el mismo período del año previo, debido al mayor gasto gubernamental en la respuesta al COVID-19.
Su deuda llegó a 1.045,5 billones de wones (839.550 millones de dólares), a fecha de fines de noviembre, lo que supone un aumento intermensual de 7,3 billones de wones (5.866 millones de dólares), según el ministerio.