Insurgentes en una motocicleta abrieron fuego el martes contra un puesto de la policía en el conflictivo noroeste de Pakistán y mataron al menos a dos agentes e hirieron a otros tres antes de huir del lugar, según funcionarios.
Nadie se atribuyó de inmediato la responsabilidad por el ataque en Shangla, una ciudad en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, que limita con Afganistán. El agente de policía local Nasir Khan dijo que los heridos fueron trasladados a un hospital cercano.
En un comunicado, el ministro del Interior, Mohsin Naqvi, condenó el ataque y ofreció sus condolencias a las familias de los fallecidos. Apuntó que los “khwarij” — un término utilizado para los talibanes paquistaníes — estaban detrás del ataque, pero no ofreció más detalles.
En los últimos meses, Pakistán ha registrado un aumento de los ataques insurgentes, la mayoría atribuidos a separatistas en la provincia suroccidental de Baluchistán y al Talibán paquistaní, conocido como Tehrik-e-Taliban Pakistán o TTP. Aunque el TTP es aliado de los talibanes que tomaron el poder en Afganistán en 2021, es un grupo independiente.
En noviembre, un atacante suicida mató a 12 efectivos de seguridad e hirió a varios más tras hacer explotar un vehículo cargado de explosivos en un puesto de seguridad en Bannu, un distrito en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa.